viernes, 30 de noviembre de 2007

Así no...

Coger el metro por la mañana es una experiencia única, toda una aventura.
Sales optimista de casa, entras en el metro, bajas las escaleras corriendo, y justo cuando llegas a la última oyes como el tren se va. Bueno, no pasa nada, aún tengo tiempo, cogeré el siguiente.
En 3 minutos. No deja de llegar gente al andén. Gente y más gente... De donde saldrá tanta?? Es que todos vamos al mismo sitio??
Cuando el andén ya está lo suficientemente lleno como para llenar un tren llega el siguiente. Cuando en cada ventanilla hay más de 4 personas con la cara aplastada yo decido esperar al siguiente. Está bien, llegaré un poco tarde, pero respiro. Hay otra gente que no se rinde y empuja hasta que consigue meterse, como cuando cierras una maleta demasiado llena.
En 4 minutos llega el siguiente. El andén vuelve a estar lleno y otra gente pegada a las ventanillas, pero ya no hay otra opción, hay que subirse o te pasarás allí toda la mañana. Ahora o nunca. Te olvidas de tus principios y educación y consigues meterte. Rezas para que las puertas no te pillen el brazo, y cuando por fin se cierra sueltas el aire. Los has conseguido, pero empieza otra aventura.
Una vez dentro pierdes tu esquema corporal, no sabes que es tu cuerpo y que está tan pegado a ti que lo parece. No hace falta que nadie se coja a las barras, es imposible caerse, de hecho tendrías suerte si pudieras caerte.
En cada parada resistes empujones y golpes varios sin enfadarte e intentando que no te saquen del metro.
Cuando por fin llegas sales como puedes y de nuevo respira.
Si es que, en realidad, no me extraña nada que la gente aproveche los contactos, si no hay nada más parecido a una orgía.
Y así... así no se puede empezar bien un día.
Hoy estoy enfadada con el mundo.

lunes, 26 de noviembre de 2007

Because...

El otro día Elena, mi compañera de piso y psicologa, me contó una historia de las que le enseñan en clase.

Era un documental que comenzaba con dos bebes gemelos con problemas para orinar. Los médicos decicieron circuncidarles, pero con uno de ellos salió mal y le "destrozaron" el pene. Ahí comenzó el problema... Decidieron que lo mejor era cortarle el pene y convertirlo en una niña. Por aquel entonces, un psicólogo trataba de demostrar que los niños y las niñas sólo eran diferentes por la forma en que se les criaba, que si a un niño se le educaba como a una niña sería una niña y viceversa.

Así este hombrecillo convenció a sus padres de convertir a su hijo en hija (ocasión perfecta para probar su teoría). Le operaron y el psicólogo le realizó un seguimiento durante toda su infancia. Al niño disfrazado de niña le insultaban en el colegio y no creo que tuviera una infancia muy feliz. Sin embargo, el psicólogo pensó que todo iba bien, que no había ningun problema, y cuando el niño cumplió los 14 (o por ahí, no me acuerdo) decidió que su estudio había concluido con éxito y que su teoría había sido probada. Así lo publicó y tan contento se quedó.

Por otro lado se quedó el niño. Los padres lo veían tan triste y tan mal que unos años después decidieron contarle lo que había pasado. Ese fue el momento en el que todo se aclaró para él. Se volvió a operar y se volvió a hacer hombre.

El documental acababa diciendo que este hombre se casó años después con una mujer con hijos y que vivían en una casa en no se donde (tipo película de los domingos por la tarde), y con el hombre, cabreado (lógicamente) y diciendo que nadie te puede decir lo que eres, que tú lo sientes y ya está.

Al parar el video la profesora aclaró más la historia y dijo: "Sabeis como sigue la historía? El hombre se pegó un tiro en la cabeza, el hermano murio de sobredosis y la madre... (a la madre también le pasaba algo pero no recuerdo el que)"

Eso sí, el psicólogo no publicó nada sobre esta segunda parte...

Y este video... por "American Beauty" y por las canciones bonitas.

martes, 20 de noviembre de 2007

Coronas y Reyes...

No hay nada como una buena conversación con una niña de 5 años. Te descubren el mundo poco a poco...


Niña 1: De quién son estas coronas??
Yo: No sé.
Niña 2: Seguro que se les han olvidado a los Reyes Magos...
Niña 1: Pues sí... (con cara de: que despistados estos Reyes...)

Si es que... de quien van a ser unas coronas, y en estas fechas... Solo pueden ser de los Reyes Magos.

Un poco más tarde se acercan otras 2, una llorando y otra con cara de susto.

Yo: Qué ha pasado?
Niña 3: Que me ha pisado el brazo!
Niña 4: No! Yo no he sido! Es que ha puesto el brazo debajo!!

Pues sí, no se debe poner el brazo debajo del pie de nadie, y si lo haces... luego no vale quejarse.

Con lo bien que lo entendemos todo con 5 años... y el tiempo parece que nos hace tontos.

Ayer salí corriendo de clase para ir a trabajar. Voy tan concentrada que hasta que no llegué al tren y me puse a esperar no me di cuenta de que estaba nevando. La de cosas que me perderé cada día... Para compensar, por la tarde que parece noche me di un paseo por Princesa, con el frio en la cara y sin ninguna prisa. Y suficiente es para arreglar un día estresante.

El otro día vi a un señor que casi pega a una señora, a una chica sacándole fotos a otra (a la que no conocía) por su "extraña" forma de vestir, y a algún personaje curioso más... que... no tengo tiempo para escribir más pero... En fin, la gente...

Y ahora me voy, a lidiar con mis niñas, sus incansables fuerzas y mis pocas ganas.
Y sin paragüas.